He comenzado a escribir este post y he tenido que pararlo porque he comenzado a hablar de mis sentimientos y demas y creo que eso lo voy a dejar, lo mas resumido posible, para el epilogo... Asi que estamos de suerte y si el tiempo me llega hoy habra doble post!!
Solo os contare un poquito por encima esta ultima semana en Luang Prabang, donde he hecho de mis paseos por templos mi rutina diaria en busqueda de fotos que no han acabado de salir, pero el camino (como este viaje) y las charlas con los monjes han sido suficientemente interesantes y productivas, por supuesto.
Ya el primer dia hice migas con Compai (asi, tal como suena, no se como se escribe) un joven monje de 15 anyos que me ensenyo parte del templo y con el que estuve hablando largo rato y acabe despidiendo con la promesa del luego volvere.
Asi, al cabo del primer y segundo dia, que pase mas bien solo y tranquilo, pude desarrollar algo en mi mente las imagenes que queria, lo que siempre ayuda aunque luego uno no las consiga. Tenia mis cuatro templos localizados, mas o menos cerca, a los que he ido visitando diariamente, por unos minutos o unas horas.
A veces encontraba un buen encuadre y otras, simplemente, un buen sitio donde poder leer un rato o escribir sentado a la sombra de un arbol donde tarde o temprano venia algun monje a ver que hacia ese blanco alto sentado ahi y comenzabamos a charlar un poco.
Todo muy zen, vamos! :P
El caso es que al final de esta semana los resultados han sido algo insatisfactorios porque despues de comprobar "la tension en el ambiente" cuando sacaba una camara como si se preguntaran que iba a hacer decidi no cortar el buen rollo que circulaba y despedirme, ayer, con una sonrisa y no con una foto. Eso si, con otras fotos hechas y alguna que otra bien definida, algo me he acercado a esa "estetica de la desaparicion" que, sin duda, espero desarrollar para algun trabajo... (eh, Marcus?.
(las vistas de la parte trasera del templo, en nuestras charlas...)
Al final casi me he convertido en un "erudito" en la materia de la vida monastica budista! Me se sus horarios, sus inquietudes, tambien, sus ilusiones y su cruda o contradictoria vuelta a la realidad, una vez que dejan los habitos, lo que suele suceder en la mayoria de los casos. A cambio, yo he divagado con ellos sobre las diferencias entre Vietnam y Laos, sobre mis experiencias viajeras, sobre Espanya y Barcelona, como no...
Tambien durante estos dias han acaecido esas famosas "boat races" que tanto habia anunciado yo a bombo y platillo y que han resultado ser todo un festival y dia de jolgorio nacional para la gente de la ciudad. Las carreras, en las que participaban multitud de botes de diferentes pueblos (en la modalidad "ganador sigue, perdedor a casa"), no paraban de sucederse, mientras multitud de puestos de feria y de comida y bebida (eminentemente para locales, no como el mercado nocturno) se sucedian y todo en general era un follon formidable.
(cuesta verlas con la camara del movil, pero a lo lejos hay dos barcas de 30 remeros cada una disputando una de esas carreras!)
La verdad es que toda la ciudad estaba ahi y por primera vez (y no creo que se repita mucho) muchas tiendas y restaurantes cerraron para ver el acontecimiento. Las carreras, ademas, estaban televisadas!
(el realizador, en la parte baja del encuadre, pinchando las imagenes en "diresto")
Por la tarde hubo ganador, aunque yo no me entere muy bien porque me habia ido a pasear despues de comprobar lo que me costaba ver las carreras (todos los sitios tomados) y que no pillaba nada sobre la logica de las mismas, no como ellos, que seguian animando a los equipos ganadores y tal, claro.
Yo me fui a pasear, a las orillas del Mekong con el Nam Kan, donde encontre a este joven pescador que iba sacando de vez en cuando pequenyos proyectos de peces... no se si con el animo de cultivarlos o con el animo de darselos al gato, porque pequenyos lo eran y mucho!
Por las noches acabe conociendo a una pareja simpaticas de holandeses, Mark y Ashley, que eran del tipo de personas extrovertidas que acaban haciendo un grupo de gente de la nada y en un visto y no visto eramos una gran familia tomandonos unas cervezas en el bar mas animado de Luang Prabang, el Lao Lao Garden. La tradicion, cuando ellos se fueron, siguio mas o menos, aunque solo quedamos al final Nick, un joven australiano que comienza a viajar por unos meses (esto no se para...) y servidor.
Afortunadamente, una vez me acabe el gran y duro "Si esto es un hombre" de Primo Levi, cayo en mis manos uno de los dos libros en espanyol que habia en la libreria mas grande de la ciudad. Uno era de asesinatos, por P.D. James y el otro, que es el que tengo aqui encima es "El hombre duplicado" de Saramago, un senyor libro! La verdad es que no me cabe duda de que hay veces que los libros (como tantas otras cosas en la vida) nos "esperan", de manera muy personal.
Estoy notando que esto ultimo post viajero esta siendo algo aseptico... Espero que me podais disculpar pero creo que en la segunda parte, en el epilogo vendra el contenido emotivo!
Muchas gracias por leerme todo este tiempo y por hacer de todo esto algo mas grande, vuestro viaje.
Un abrazo a todos.
Bien grande.
1 comentario:
Hola Alberto, no me resulta aseptico, solo es diferente al resto. Quizás con la perspectiva de que te quedaban tan pocas horas, una parte de tí ya estaba "volviendo"
Me pregunto. porque son tan sociables los monjes. Es una cuestion del caracter de los budistas o en el fondo hay cierto proselitismo, simplemente curiosidad de gente joven?
No sé, parecen tan fuera de lo normal.
Espero que ahora estés teniendo un buen vuelo y puedas dormir.
Nos vemos en unas siete horas, casi no me lo puedo creer !!!!
Besitosssssssssss
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